La Iglesia Alianza, Cristiana y Misionera de Hollywood busca consolidarse como una iglesia reconocida por la comunidad, por su sana doctrina, su interés por servir a los más necesitados y fortalecer la vida de cada creyente que hace parte de nuestra congregación. En consecuencia a través de este plan se presentan los objetivos a cumplir acompañado de unas metas realizables, las estrategias necesarias para el alcance de las mismas, los recursos y el equipo comprometido que harán efectivo el cumplimiento de este plan.
Nuestra Historia
La Iglesia Alianza Cristiana y Misionera de Hollywood, comenzó como un grupo en formación en casa de la familia Buitrago en octubre de 1985. El Rev. Eugenio Castañeda de la Primera Iglesia Hispana de Hialeah, por un tiempo ayudó con estudios bíblicos y servicios de Oración en los hogares. Y en 1986 la Iglesia tuvo su primer pastorado a medio tiempo con el Hno. Arnaldo Quesada.
El 25 de Abril de 1986, el Distrito Hispano del Este, le confiere a la Iglesia su acreditación oficial. A partir de octubre de 1986 la Iglesia empezó a reunirse en el Templo de la Iglesia Metodista en Hollywood, contando con el apoyo del pastor Rolando Pichardo. Y como en octubre de 1986, la Iglesia tuvo su segundo pastorado bajo el ministerio del pastor Martí. En el año 1988 el Rev. Miguel Amadis asumió el tercer pastorado de la Iglesia. Y durante la primera mitad del año 1991, la Iglesia estuvo sin pastor, y el hno. Jorge Valle y la Junta quedaron a cargo de la obra. Mas tarde el Pastor David Garcia, asume el pastorado de la Iglesia a partir de Junio de 1991 hasta Julio de 2007. Y en Agosto del 2007, el Pastor Gustavo Polo es instalado como pastor de la Iglesia hasta el presente.
El actual Templo fue adquirido por la Iglesia en 1995, el cual fue un edificio construido en 1984. Y el anexo de la iglesia (La casita) fue comprada en el año 2002. Años mas tarde, a fines de 2014 la Iglesia se propuso hacer una campaña con el propósito de levantar fondos para cancelar la hipoteca vigente, y de esa manera poder iniciar el proyecto de remodelación de todo el Templo. Gracias a la participación generosa de la Iglesia, y de una ofrenda especial entregada por una hermana de la congregación, la Iglesia pudo cancelar el total de su hipoteca.
Entonces en Enero 2017, se comenzaron los trabajos de remodelación del Templo, inicialmente con mano de obra propia (dirigida por Raul Aguirre y Richard Valencia) y con fondos propios, sin conocer al inicio todo lo que implicaba cumplir con todos las inspecciones y códigos actuales de la ciudad de Hollywood. Y es allí donde acudimos por provision divina al arquitecto Héctor Torres, y asimismo a Carlos Izquierdo y su compañía quienes fueron nuestro general contractor. Luego se añadieron nuestros vecinos Tirone Electric (John Tirone) y Lord’s A/C (Edgar Greenhauff) quienes nos apoyaron generosamente. Finalmente, la Iglesia respaldó solicitar un préstamo a ADF, con lo cual se pudo terminar la última etapa, y la ciudad finalmente nos dió toda su aprobación final el 25 de Junio. Gloria a Dios por siempre!
Nuestros Valores
La centralidad de la Palabra inspirada por Dios, como regla de fe y conducta para todos los cristianos.
La importancia de presentar a Jesucristo como el único camino para obtener salvación y vida nueva.
El ministerio del Espíritu Santo tanto a nivel personal, como congregacional, reconociendo sus dones, y el llamado constante de Dios a vivir continuamente una vida llena del Espíritu Santo.
La oración como el recurso más importante que Dios ha provisto para la comunión con EL, y para el ministerio intercesor de la Iglesia.
La Adoración y la Alabanza, como una genuina y libre expresión de nuestro amor y prominente reconocimiento a Dios, por todo lo que EL es, y por todo lo que EL hace en la vida de sus hijos.
El diligente estudio de la Palabra de Dios a través de las clases de la Academia Bíblica, y los diversos ministerios que la Iglesia ofrece, para la preparación y crecimiento espiritual de todos los creyentes.
Nuestro compromiso con las misiones mundiales de la Alianza, a través de la oración, la ofrenda misionera y el apoyo en el campo misionero.
La diversidad cultural que nos caracteriza como Iglesia, la cual respetamos, valoramos y nos enriquecemos de ella, con el propósito que el mensaje de Cristo sea siempre relevante en toda cultura.
Nuestra Denominacion
La Alianza Cristiana y Misionera es una alianza de creyentes evangélicos, unidos en iglesias locales, comprometidos a cumplir la Gran Comisión dada por nuestro Señor Jesucristo. Mateo 28:19 y 20 nos instruye, “Por tanto, id, haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado.” Somos una entidad cristiana porque creemos en Jesucristo y le seguimos como Salvador y Señor. Somos misionera porque no hemos comprometido a llegar a gente no alcanzada con las buenas nuevas de Jesucristo. Hoy en día hay más de 2,000 Iglesias Aliancistas en los Estados Unidos, y aproximadamente 20,000 Iglesias y grupos en 81 países, con cerca de 5 millones de cristianos aliancistas alrededor del mundo.
Historia de La Iglesia Alianza, Cristiana y Misionera
En 1881, el pastor de la Iglesia Presbiteriana de la Calle 13ª, en Nueva York, Albert Benjamin Simpson, dimitió de su cargo para dedicarse “a las masas rechazadas y sin iglesia”. Para ello, organizó un instituto de entrenamiento misionero y un centro de evangelización (el Missionary Training Institute y el New York Gospel Tabernacle), publicó asimismo una revista para difundir su mensaje, “The Word, The Work, and The World” (hoy conocida como Alliance Life). Para 1884, Simpson y sus seguidores fueron capaces de financiar el envío de cinco misioneros al Congo (actual República Democrática del Congo).
El año 1887 vería la fundación de las dos sociedades misioneras que luego se convertirían en la Alianza Cristiana y Misionera, movilizando a creyentes evangélico-protestantes hacia la fundación de iglesias fuera de los países ya evangelizados (desde el punto de vista protestante), señalaba Simpson: “para llevar la Biblia entera el mundo entero”. Simpson creía que una vida “rendida totalmente a Cristo” (una manera evangélica de referirse a la Consagración cristiana) era una en la cual el trabajo evangelizador tenía importancia suprema. Del mismo modo, pensaba que una persona “controlada por el Espíritu Santo” no podía sino implicarse activamente en la misión evangelizadora de la Iglesia, tanto en ultramar como en el propio país.